El Jardín Botánico, la mayor reserva de vegetación y flora tropical del país y patrimonio de la humanidad, se encuentra asfixiado por la inseguridad. El azote se mezcla entre la espesa vegetación y cobra terreno en las 70 hectáreas del recinto que reúnen a más de 4000 ejemplares de palmas de todo el mundo y más de 100 000 árboles que resumen la riqueza biológica de Venezuela.

La administradora de la Fundación Jardín Botánico de Caracas, Gladys Vergel, señaló que “desde el mes de abril, las 70 hectáreas del Instituto Experimental Jardín Botánico Dr. Tobías Lasser quedaron sin la protección de la Guardia Nacional Bolivariana, lo que ha provocado que los robos se incrementen de forma alarmante, hasta llegar al punto que en las últimas semanas los hurtos se realizan diariamente”.

“Hemos perdido todo el sistema eléctrico, equipos de computación, oficina, jardinería, piezas sanitarias, alumbrado, sistema de refrigeración, hasta llegar al punto que se han hurtado el servidor principal que contiene información del Herbario Nacional de Venezuela, fundado en el año 1921 y considerado Patrimonio Cultural de la Nación, además han sustraído de la biblioteca Henri Pittier importante material bibliográfico. “Son colecciones con más de 100 años de antigüedad que son un patrimonio insustituible”, destacó Vergel.

Ante la grave situación, el personal se ha dirigido en reiteradas ocasiones al Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalistas sin obtener respuesta.

“Hemos reportado más de 16 denuncias, sin embargo los cuerpos de seguridad sólo nos han visitado en tres oportunidades, vienen toman fotos y huellas y se retiran”, enfatizó la administradora.

Debido a la cantidad de robos, la directora de Mantenimiento UCV, Carmen Yegres, dijo que según informe presentado ante las autoridades universitarias “el sistema eléctrico del Jardín Bótanico fue declarado en pérdida total debido a que la sustracción de materiales asciende a más de 100 millones de bolívares y se hace casi imposible restituirlo”

En el botánico de la UCV laboran 80 biólogos, jardineros y personal administrativo, funciona además el Centro de Investigación y Desarrollo, que estudia plantas en peligro de extinción.

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Los investigadores del Instituto Jardín Botanico han destacado que debido a la pérdida del sistema de aire acondicionado, tanto los ejemplares de la Biblioteca Henri Pittier y el Herbario Nacional de Venezuela se encuentran en riesgo máximo de contaminación, ocasionando que se pierda material valioso para las investigaciones venezolanas .

Solamente en el Herbario Nacional de Venezuela  reposan más de 430 000 especímenes de plantas, y  la Biblioteca Henri Pittier resguarda textos que datan del siglo  XVIII, escritos por Codazzi y el propio Pittier.

“En el Herbario Nacional reposan muestras tipo que son las primeras que se toman de esa planta para ser referencia en la botánica. Debido a la falta de luz y refrigeración se está corriendo el riesgo de perder muestras que datan de los años 1700 y 1800, una de las colecciones más antiguas e importantes de Venezuela”, apuntó Vergel.

Luisa Virginia Pérez, jefa de la Biblioteca Henri Pittier, destacó que el material bibliográfico necesita unas condiciones ambientales óptimas.

“Tenemos colecciones antiguas, la información que acá reposa es única, investigadores nacionales e internacionales han visitado nuestras instalaciones, sin embargo en este momento no podemos brindarle un servicio de calidad, pues se han llevado las herramientas de difusión: escaner, fotocopiadoras, impresoras y todo nuestros equipos de trabajo”.

Por su parte, la investigadora Irene Fedum señaló que en el Herbario Nacional de Venezuela reposa la colección de muestras botánicas secas más importantes del país, las cuales deben tener unas condiciones mínimas de humedad y temperatura. Si esto no se cumple puede perderse todo el material.

“Estamos tratando de hacer un mínimo de esfuerzos para preservarlas, sin embargo, las muestras están sujetas a infecciones, lo que ha provocado pérdidas invaluables”.

De igual manera, el investigador Jesús Hernández señaló que estos robos han causado daños insuperables a la ciencia, pues en el Instituto Jardín Botánico se analizan  las diversas plantas que existen para dar paso a las investigaciones en el área de medicina, farmacia y ecología, además de brindar aportes al descubrimiento de especies que le darían cura a nuevas enfermedades.

Para el ingeniero agrónomo, Jan Tillett, perteneciente a la sección de víveros, estos hurtos a las instalaciones han impedido que se realicen nuevas siembras, debido a que la falta de luz y el robo de la cava refrigeradora han impedido preservar las semillas.

“Han sustraído todo el material de jardinería, no contamos ni con luz ni agua y las especies de bromelias y orquídeas han sido robadas”.

A pesar de la situación crítica, los investigadores y empleados tienen esperanzas de recuperar el Jardín Botánico de Caracas, por lo que hacen un llamado a las autoridades universitarias y al Gobierno Nacional para que los apoyen en materia de seguridad.

“Nuestro llamado es a participar y a regar la voz sobre la deplorable situación de una joya de la ciudad que nos pertenece a todos y que resguarda años de historia natural del país, destacando el hecho de que el Jardín Botánico de Caracas y el Jardín Botánico de Kew en Londres son los únicos jardines del mundo que son patrimonio de la humanidad”, finalizó Gladys Vergel.